Anita Piscazzi ha sido seleccionada entre 268 participantes a la I Convocatoria Internacional de Poesía Vuela Palabra. He sido yo quien ha tenido el placer de llevar sus versos al español y, en este ejercicio tan profundo como lo es la traducción, he logrado advertir esa intensa pasión con la que Piscazzi escribe. Sus poemas son metafísicos y, en ellos, la huella de su formación en música e investigación está presente. Cada línea constituye un intento por ahondar en el misterio de las cosas simples que, a menudo, no observamos sino que dejamos pasar. La poeta, al contrario, se detiene, respira el aire de las cosas y las hace tan suyas, que casi podemos ver el musgo enredado en la suela de sus zapatos y su voz que cae como un manantial fresco. Su verso es la resurrección de las violetas, aquellas fragantes flores cuya ausencia evoca para devolvernos la armonía de la naturaleza. Y para cerrar con broche de oro, su último poema nos hace un llamado a la escucha de ese universo que, vasto, se expande bajo nuestra mirada distraída (“Sólo escucha, cierra la boca[…]/ mira cómo se manifiesta el universo”).
I
Para privarme de mí misma y de los demás,
alcé las velas a la primavera,
seguí el matorral de musgos
para que bajo los zapatos
se aferrara el polvo de mi tierra,
para recordarla, cuando los demás no me reconocen.
Soy una ramita que vuela, mendicante de ánforas eternas,
en cada amanecer rezo para que el agua esté fresca
que mi ser otra fuente no vea.
I
Per privarmi di me stessa e degli altri,
ho alzato le vele alla primavera,
ho seguito il cespo di muschi
perché sotto le scarpe
si attaccasse la polvere della mia terra,
per ricordarla, quando gli altri non mi riconoscono.
Sono fuscello che vola, mendicante di anfore eterne,
ad ogni alba prego che l’acqua sia fresca
che l’essere mio più fonte non veda.
II
El desequilibrio de las imágenes
a veces se convierte en una orilla sin agua.
El retorno del invierno promete
una luz nueva.
A cada paso verte, saludarte,
regresar sin nada en el bolsillo.
Soy como cada cosa que arde.
Acógeme Ángel de luz
aferré mis ojos a los almendros,
haré testamento de tu tránsito.
Serás riachuelo sobre los huesos esparcidos en los mares
sobre la muerte de la violeta de marzo.
Quédate. Canta sobre la miel de Alepo
de la juventud que queda en los jardines.
Aconteces ligero frente a la puerta
sin embargo la luz se va pronto, pero
aquí no pasa y lentas van las serpientes.
II
Lo scompenso delle immagini
a volte si fa riva senz’acqua.
Il ritorno dell’inverno promette
una luce nuova.
A ogni passo vederti, salutarti,
ritornare con niente in tasca.
Sto come ogni cosa che brucia.
Accoglimi Angelo di luce
ho attaccato gli occhi ai mandorli,
farò testamento del tuo passaggio.
Sarai sorgente sulle ossa sparse nei mari
sulla morte della viola di marzo.
Rimani. Canta del miele di Aleppo
della giovinezza che resta nei giardini.
Accadi leggero davanti alla porta
eppure se ne va presto la luce, ma
qui non passa e lente vanno le serpi.
III
Cada cosa, dondequiera que fijes la mirada,
te parecerá sin forma
y tus compañeros de viaje serán
tan solo la llama, el camino, la señal.
Sólo escucha, cierra la boca
e incluso si tienes cien pliegues de fieltro encima,
mira cómo se manifiesta el universo.
Tu relámpago será pura luz.
III
Ogni cosa, ovunque volgerai lo sguardo,
ti sembrerà non avere forma
e i tuoi compagni di viaggio saranno
unicamente la fiamma, la strada, il segno.
Soltanto ascolta, chiudi la bocca
e anche se hai cento pieghe di feltro addosso,
guarda come si manifesta l’universo.
Il tuo lampo sarà pura luce.
Anita Piscazzi (Bari-Italia,1973) poeta, pianista e investigadora. Trabaja en el campo de los estudios etnomusicológicos y didáctico-musicales. Ha publicado: Amal (Palomar,2007), Maremàje (Campanotto,2012), Alba che non so (CartaCanta,2018), Ferma l’Ali, cd poético-musical (desuonatori, 2020). Ha sido traducida a varios idiomas, está en “Ossigeno Nascente” (Atlante dei poeti contemporanei italiani-Università di Bologna-), en Almanacco dei poeti e della poesia contemporanea (Raffaelli,2018), en “PoetrySoundLibrary” en Londres y en “Voices of Italian Poetas «de la Universidad de Turín. Ha sido publicada en antologías y revistas italianas y extranjeras. Ganadora del Premio Isabella Morra 2017 y el Premio InediTo 2017. Colaboró en los proyectos poético-musicales: “Alda e il soldato rock” con Eugenio Finardi; «Ferma l’Ali» con Michel Godard y el proyecto teatral: «Miss Kilimanjaro” en Kenia para“ Avis for Children” con Lidia Pentassuglia. Colabora en diversas revistas poético-literarias y está a cargo de la columna de música y poesía del “SimposioItaliano”, revista cultural bilingüe francesa.