Hoy quiero compartirles tres poemas de Armanda Guiducci en mi traducción al español. Ella fue una poeta italiana muy reconocida por su poesía feminista. Autora de importantes libros como Poesie per un uomo (1965), y A colpi di silenzio (1982); obras de las cuales hacen parte los poemas que presento.
De Poesie per un uomo, 1965
LA INVENCIÓN
Si no existieras,
yo te inventaría,
créeme, exactamente
como eres.
Te inventaría a fuerza
de dolor
como se hace con Dios
o aquellas cosas de las cuales
falta el ejemplo,
y el hombre crea:
el pensamiento, la imagen,
el recuerdo, la palabra,
la danza,
el dulce sonido,
pues el amor mismo
es un invento
L’INVENZIONE
Se non ci fossi tu,
ti inventerei,
credimi, esattamente
come sei.
Ti inventerei a furia
di dolore
come si fa con Dio
o quelle cose di cui
l’esempio manca,
e l’uomo crea:
il pensiero, l’immagine,
il ricordo, la parola,
la danza,
il dolce suono,
poiché l’amore stesso
è un’invenzione.
HOMBRE
Diferente a mí en todo… macho, extraño,
otra carne, otro corazón, otra mente,
aún así, mi propio cuerpo prolongado,
la voz que se divide, y me sigue:
lo que se opone, y lo que me compone
como un discurso tenso, nunca concluido,
o el otro ojo: el rayo que converge
al relieve, al clic de las cosas —
mi opuesto necesario, cruel asombro
es amarte: disfrutar dos vidas
en esta misma, tener doble muerte.
UOMO
Altro da me in tutto… maschio, estraneo,
altra carne, altro cuore, altra mente,
pure, il mio stesso corpo prolungato,
la voce che si sdoppia, e mi continua:
ciò che si oppone, e ciò che mi compone
come un discorso teso, mai concluso,
o l’altro occhio: il raggio che converge
al rilievo, allo scatto delle cose −
mio necessario opposto, crudele meraviglia
è amare te: godere di due vite
in questa sola, avere doppia morte.
Del libro A colpi di silenzio, 1982
SYLVIA PLATH
Morir es un arte,
como todo lo demás.
….Sylvia Plath
Aterrorizada en el vivir
y con tal pureza e intensidad
que te asemeja a Ofelia
¿para quién cantaste, Sylvia
tu tenso y breve canto mortal?
Los hombres no perdonan a una mujer
ni la locura ni la lúcida tensión
ni la belleza interior que irradiabas
tú, dolida y asesinada
por las vulgaridades
de microscópicos infiernos
y por el desamor del amor
Ellos, por lo tanto, no te han perdonado.
Te amamos nosotras, como un símbolo de nosotras
que sufrimos los ultrajes de intentar,
más allá del arte de la represión,
un sentido a la existencia femenina:
nosotras, en esta desplazada locura,
te amamos con un simbólico amor.
SYLVIA PLATH
Morire è un’arte,
…….Come ogni cosa.
……..Sylvia Plath
Atterrita nel vivere
e con una purezza tale e intensità
da somigliare a Ofelia
per chi hai cantato, Sylvia
il tuo canto mortale teso e breve?
Gli uomini non perdonano a una donna
né la follìa né la tensione lucida
né la bellezza interiore che emanavi
tu, dolorosa e uccisa
dalle volgarità
di microscopici inferni
e dal disamore dell’amore
Loro, dunque, non ti hanno perdonata.
Ti amiamo noi, come un simbolo di noi
che patiamo gli oltraggi del tentare,
oltre l’arte della soppressione,
un senso all’esistenza femminile:
noi, in questa traslata follìa,
ti amiamo di un simbolico amore.
Armanda Guiducci, nació en Nápoles en 1923, se mudó joven al norte de Italia, donde se graduó en Filosofía en la Universidad de Milán.
Guiducci inició su carrera artística con dos colecciones de poesía: Poesie per un uomo (1965) la cual tuvo un enorme suceso y, posteriormente A colpi di silenzio (1982).
En la década de 1970, participó activamente en el debate feminista, produciendo una serie de libros sobre la condición de la mujer, entre ellos: Due donne da buttare (1976), La donna non è gente (1977), All’ombra di Kalì (1979) e Donna e serva (1983). En tiempos más recientes, continuó escribiendo sobre feminismo y publicó dos volúmenes de la historia de la mujer, editados por Sansoni. Murió en 1992 a causa del cáncer.
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