El escritor Gianni Darconza nos presenta una selección de poemas del poeta chileno Pablo Neruda, en su traducción al italiano.
Sucede que me canso de ser hombre.
Sucede que entro en las sastrerías y en los cines
marchito, impenetrable, como un cisne de fieltro
navegando en un agua de origen y ceniza
Succede che mi stanco di essere uomo.
Succede che entro nelle sartorie e nei cinema
avvizzito, impenetrabile come un cigno di feltro
che naviga in un’acqua di origine e cenere
Me gustas cuando callas porque estás como ausente
Me gustas cuando callas porque estás como ausente,
y me oyes desde lejos, y mi voz no te toca.
Parece que los ojos se te hubieran volado
y parece que un beso te cerrara la boca.
Como todas las cosas están llenas de mi alma
emerges de las cosas, llena del alma mía.
Mariposa de sueño, te pareces a mi alma,
y te pareces a la palabra melancolía.
Me gustas cuando callas y estás como distante.
Y estás como quejándote, mariposa en arrullo.
Y me oyes desde lejos, y mi voz no te alcanza:
déjame que me calle con el silencio tuyo.
Déjame que te hable también con tu silencio
claro como una lámpara, simple como un anillo.
Eres como la noche, callada y constelada.
Tu silencio es de estrella, tan lejano y sencillo.
Me gustas cuando callas porque estás como ausente.
Distante y dolorosa como si hubieras muerto.
Una palabra entonces, una sonrisa bastan.
Y estoy alegre, alegre de que no sea cierto.
Mi piaci quando taci perché sei come assente
Mi piaci quando taci perché sei come assente,
mi ascolti da lontano, e la mia voce non ti tocca.
Sembra che i tuoi occhi si siano dileguati
e sembra che un bacio ti abbia chiuso la bocca.
Poiché tutte le cose son piene della mia anima
tu emergi dalle cose, piena dell’anima mia.
Farfalla di sogno, somigli alla mia anima,
e somigli alla parola malinconia.
Mi piaci quando taci e sei come distante.
E sembri lamentarti, farfalla tubante.
E mi ascolti da lontano e la mia voce non ti arriva:
lascia che io taccia con il silenzio tuo.
Lascia che ti parli anche col tuo silenzio
chiaro come una lampada, semplice come un anello.
Sei come la notte, silenziosa e stellata.
Il tuo silenzio è di stella, così lontano e semplice.
Mi piaci quando taci perché sei come assente.
Distante e dolorosa come se fossi morta.
Basta allora una parola, un sorriso soltanto.
E sono felice, felice che non sia vero.
La muerte
He renacido muchas veces, desde el fondo
de estrellas derrotadas, reconstruyendo el hilo
de las eternidades que poblé con mis manos,
y ahora voy a morir, sin nada más, con tierra
sobre mi cuerpo, destinado a ser tierra.
No compré una parcela del cielo que vendían
los sacerdotes, ni acepté tinieblas
que el metafísico manufacturaba
para despreocupados poderosos.
Quiero estar en la muerte con los pobres
que no tuvieron tiempo de estudiarla,
mientras los apaleaban los que tienen
el cielo dividido y arreglado.
Tengo lista mi muerte, como un traje
que me espera, del color que amo,
de la extensión que busqué inútilmente,
de la profundidad que necesito.
Cuando el amor gastó su materia evidente
y la lucha desgrana sus martillos
en otras manos de agregada fuerza,
viene a borrar la muerte las señales
que fueron construyendo tus fronteras.
La morte
Sono rinato molte volte, dal fondo
di stelle sconfitte, ricostruendo il filo
delle eternità che ho popolato con le mie mani,
e adesso morirò, semplicemente, con la terra
sopra il mio corpo, destinato a essere terra.
Non ho comprato una porzione di cielo che vendevano
i sacerdoti, non ho accettato le tenebre
che il metafisico fabbricava
per potenti sfaccendati.
Viglio starmene nella morte con i poveri
che non ebbero tempo di studiarla,
mentre li bastonavano quelli che hanno
il cielo spartito e già pronto.
Tengo pronta la mia morte, come un vestito
che mi attende, del colore che amo,
della misura che ho cercato inutilmente,
della profondità di cui ho bisogno.
Quando l’amore ha consumato la sua materia evidente
e la lotta sgrana i suoi martelli
in altre mani di forza aggiunta,
viene la morte a cancellare i segnali
che avevano costruito le tue frontiere.
Oda a unas flores amarillas
Contra el azul moviendo sus azules,
el mar, y contra el cielo,
unas flores amarillas.
Contro l’azzurro muovendo i suoi azzurri,
il mare, e contro il cielo,
dei fiori gialli.
Octubre llega.
Y aunque sea
tan importante el mar desarrollando
su mito, su misión, su levadura,
estalla
sobre la arena el oro
de una sola
planta amarilla
y se amarran
tus ojos
a la tierra,
huyen del magno mar y sus latidos.
Polvo somos, seremos.
Ni aire, ni fuego, ni agua
sino tierra,
solo tierra
seremos
y talvez
unas flores amarillas.
Ode a dei fiori gialli
Ni aire, ni fuego, ni agua
sino
tierra,
sólo tierra
seremos
y tal vez
unas flores amarillas.
Ottobre arriva.
E benché sia
così importante il mare che sviluppa
il suo mito, la sua missione, la sua statura,
risalta
sulla sabbia l’oro
di una sola
pianta gialla
e si ormeggiano
i tuoi occhi
alla terra,
fuggono dal mare magno e i suoi battiti.
Polvere siamo, saremo.
Né aria, né fuoco, né acqua
bensì
terra,
solo terra
saremo
e forse
dei fiori gialli.
Desnuda eres tan simple como una de tus manos
Desnuda eres tan simple como una de tus manos,
lisa, terrestre, mínima, redonda, transparente,
tienes líneas de luna, caminos de manzana,
desnuda eres delgada como el trigo desnudo.
Desnuda eres azul como la noche en Cuba,
tienes enredaderas y estrellas en el pelo,
desnuda eres enorme y amarilla
como el verano en una iglesia de oro.
Desnuda eres pequeña como una de tus uñas,
curva, sutil, rosada hasta que nace el día
y te metes en el subterráneo del mundo
como en un largo túnel de trajes y trabajos:
tu claridad se apaga, se viste, se deshoja
y otra vez vuelve a ser una mano desnuda.
Nuda sei semplice come una delle tue mani
Nuda sei semplice come una delle tue mani,
liscia, terrestre, minima, rotonda, trasparente,
hai linee di luna, cammini di mela,
nuda sei snella come il grani nudo.
Nuda sei blu come la notte di Cuba,
hai rampicanti e stelle tra i capelli,
nuda sei enorme e gialla
come l’estate in una chiesa dorata.
Nuda sei piccola come una delle tue unghie,
curva, sottile, rosa finché il giorno nasce
e penetri nel sotterraneo del mondo
come in un lungo tunnel di abiti e lavori:
il tuo chiarore si spegne, si veste, si sfoglia
e torna ad essere ancora una mano nuda.
La poesía
Y fue a esa edad… Llegó la poesía
a buscarme. No sé, no sé de dónde
salió, de invierno o río.
No sé cómo ni cuándo,
no, no eran voces, no eran
palabras, ni silencio,
pero desde una calle me llamaba,
desde las ramas de la noche,
de pronto entre los otros,
entre fuegos violentos
o regresando solo,
allí estaba sin rostro
y me tocaba.
Yo no sabía qué decir, mi boca
no sabía
nombrar,
mis ojos eran ciegos,
y algo golpeaba en mi alma,
fiebre o alas perdidas,
y me fui haciendo solo,
descifrando
aquella quemadura,
y escribí la primera línea vaga,
vaga, sin cuerpo, pura
tontería,
pura sabiduría
del que no sabe nada,
y vi de pronto
el cielo
desgranado
y abierto,
planetas,
plantaciones palpitantes,
la sombra perforada,
acribillada
por flechas, fuego y flores,
la noche arrolladora, el universo.
Y yo, mínimo ser,
ebrio del gran vacío
constelado,
a semejanza, a imagen
del misterio,
me sentí parte pura
del abismo,
rodé con las estrellas,
mi corazón se desató en el viento.
La poesia
E fu in quell’età… Venne la poesia
a cercarmi. Non so, non so da dove
uscì, da inverno o fiume.
Non so come né quando,
no, non erano voci, non erano
parole, né silenzio,
ma da una via mi chiamava,
dai rami della notte,
all’improvviso tra gli altri,
tra fuochi violenti
o tornando da solo,
lì se ne stava senza volto
e mi toccava.
Io non sapevo cosa dire, la mia bocca
non sapeva
nominare,
i miei occhi erano ciechi,
e qualcosa batteva nella mia anima,
febbre o ali perdute,
e cominciai a farmi da solo,
decifrando
quella scottatura
e scrissi la prima riga vaga,
vaga, senza corpo, pura
sciocchezza,
pura saggezza
di chi non sa nulla,
e vidi all’improvviso
il cielo
sgranato
e aperto,
pianeti,
piantagioni palpitanti,
l’ombra perforata,
crivellata
da frecce, fuoco e fiori,
la notte travolgente, l’universo.
Ed io, minuscolo essere,
ebbro del grande vuoto
costellato,
a somiglianza, a immagine
del mistero,
mi sentii parte pura
dell’abisso,
ruotai con le stelle,
il mio cuore si sciolse al vento.
Pablo Neruda (Chile, 1904 – 1973). Poeta y diplomático, una de las voces más destacadas del siglo XX. Llega a España en 1934 donde entra en contacto con los poetas de la generación del 27, entre ellos, García Lorca, Alberti y Aleixandre. La guerra civil española marcará uno de los acontecimientos más decisivos en su visión personal y creativa. En 1945 ingresa al partido comunista. Entre sus libros destacan: Crepusculario (1923), Veinte poemas de amor y una canción desesperada (1924), Residencia en la tierra (1925-1935), Canto general (1950), Los versos del capitán (1952), Odas elementales (1954), Memorial de Isla Negra (1964) y el libro de memorias Confieso que he vivido (1974). En 1971 obtuvo el Premio Nobel de Literatura. Sus poemas han sido traducidos a más de 30 idiomas. Muere el 23 de septiembre de 1973, a pocos días del golpe militar de Pinochet.
Visitas: 0